Identidad propia - Lectura de los resultados del BBC 2020
La celebración de la gala de premios del Barcelona Beer Challenge -BBC en adelante-, que hasta ahora siempre se había celebrado durante el fin de semana del Barcelona Beer Festival, ha tenido lugar este pasado miércoles y jueves en remoto, a través de YouTube Live, como respuesta a las limitaciones propias del confinamiento por motivo del Covid-19.
Más allá del impacto del BBC a nivel internacional, es innegable la relevancia que tiene este certamen para nuestro sector, en clave nacional. Es por ello que he querido aprovechar la ocasión para dormir pocas horas la pasada noche y hacer algunas reflexiones acerca de los resultados. Vamos allá.
-Mis comentarios parten de una serie de premisas, que detallo al final del post para no estorbar en la exposición, pero cuya lectura recomiendo para visualizar el terreno de partida y algunas asunciones sobre las que he basado mi discurso-.
¿Qué nos dicen los resultados?
1. En primer lugar, que nuestra escena cervecera cuenta con un concurso notable, que tras cinco ediciones está más que consolidado como referente para las cerveceras del país, muchas de las cuales se esfuerzan año tras año en estar presentes con un producto cada vez mejor; así como también fuera de nuestras fronteras, a juzgar por la cantidad y calidad de marcas internacionales que toman parte en el certamen. Cada año crece la participación, la competencia para los premios, y la satisfacción entre los concursantes, cosa que sólo puede entenderse desde el mayúsculo trabajo que se hace desde la organización. Bravo.
2. Podemos, asimismo, celebrar la gran salud de nuestras cerveceras artesanas. Me emociona ver a una casi-veterana como Edge Brewing, que ha sufrido todo tipo de mutaciones y cambios por su camino, haciéndose con el primer premio tras obtener una puntuación récord en el global. Veo con ilusión, también, que tras el meritorio premio a cervecera novel de Península el año pasado, el relevo lo toma un proyecto joven, ambicioso y tan interesante como es Cierzo Brewing, de Caspe. Naturalmente, como tanta otra gente, estoy también deseoso de probar la espectacular Lager de batea de Mustache, premio a la innovación cervecera. Pero más allá de los grandes premios, podrían destacarse muchos detalles, como el hecho que cerveceras pequeñas y humildes como Gall Negre, de Arsèguel, puedan sacar dos medallas en estilos clásicos en su primera participación; la medalla que, edición tras edición, se lleva un pedazo de cerveza como la Carbonera de Cervesa Sant Jordi; y un largo etcétera.
3. Crece la participación y el reconocimiento de cervezas hechas por los grandes grupos, cuya implicación más directa es que crece también su calidad, además de la importancia que le dan a los formatos y eventos que han nacido estrechamente ligados al movimiento de cerveza artesana. Una vez superado el antiguo mantra de que a las grandes cerveceras se las trae al pairo el craft, este punto no debería sorprender a nadie que esté mínimamente bien informado. Con los recursos y capacidades de que disponen estas empresas, pensar que sus productos no pueden sacar buenas puntuaciones en una cata a ciegas es pura y simple miopía.
Este último punto, es cierto, ha generado cierta deliberación entre seguidores y comentadores de la escena cervecera en las últimas horas. Es por ello que, una vez hecha esta lectura personal de los resultados, voy a tratar de profundizar sobre el por qué de la controversia: sus razones, y sus razonabilidades.
El problema del tercer punto anterior, causa principal a mi parecer de la polémica desatada en redes, es que hacer una lectura objetiva de los resultados requiere enterrar algunos mensajes sobre los que se construyó el movimiento artesanal. La exagerada exaltación y esoterismo sobre conceptos como la naturalidad y la artesanía, en contraposición a la horrenda artificialidad de las 'industriales'. La honestidad y el cariño en la elaboración, frente a la perfidia y la codicia.
Siempre me he mostrado crítico con esta serie de mitos, si bien la perspectiva me hace entender que seguramente fueran herramientas útiles para conseguir ensanchar ese concepto de cerveza tan limitado que nos habían vendido los actores dominantes. En todo caso, creo que va siendo hora de que nos vayamos olvidando de todo esto: se trata, al final, de empresas de un mismo sector pero con una historia, estructura, recursos, objetivos y productos distintos; todas ellas con sus propias características, virtudes y defectos.
Puede debatirse, sin duda, si más allá de que los premios sean justos a nivel de méritos, conviene abrir las puertas de los feudos de la cerveza artesana a las grandes marcas. La respuesta rápida, y correcta, es que es una decisión de la organización del certamen, que puede o no ser compartida.
Cierto es que, a diferencia de cómo ha sucedido tantas veces en contrario, lejos de limitar el acceso a determinadas empresas, en el BBC todas ellas juegan en un terreno de juego nivelado. Esto provoca que cerveceras de gran tamaño y dominio puedan utilizar formatos como este concurso, nacidos como comentaba anteriormente del impulso de la cerveza artesana, para obtener exposición. Muchos entienden lo anterior como una intrusión, y como un error.
Mi visión es algo distinta. De primeras, por el alcance y reputación que tienen estos premios fuera del entorno más estrechamente vinculado al craft: me genera dudas que los premios de este certamen, con un enfoque y target comunicativo determinados, tengan algún efecto en el consumo del bebedor habitual de cerveza producida en masa. Al bebedor de artesana, si las microcerveceras siguen haciendo bien su trabajo, poco debería importarle igualmente.
Pero con una mirada más amplia, veo como una reafirmación, una cuestión de seguridad y confianza, que empresas jóvenes con pocos recursos compitan con empresas centenarias, que en un mes facturan más que el acumulado que generarán estos pequeños negocios a lo largo de toda su vida. Competir, exactamente igual que en el mercado, pero en el contexto de un concurso.
Sumemos a ello una visión más humanista e inclusiva, más propia de aquellos valores que se le suponen al craft: ¿por qué limitar la participación en función de las características de los concursantes o -como he leído por allí- a estilos determinados, a fin de obtener unos resultados deseados? Es virtuoso identificar los errores ajenos para no caer en la misma trampa.
Sumemos a ello una visión más humanista e inclusiva, más propia de aquellos valores que se le suponen al craft: ¿por qué limitar la participación en función de las características de los concursantes o -como he leído por allí- a estilos determinados, a fin de obtener unos resultados deseados? Es virtuoso identificar los errores ajenos para no caer en la misma trampa.
De la relatividad y los cabreos
Echemos, en este punto, un ojo a los datos objetivos sobre el reconocimiento que se han llevado en este BBC dos grandes grupos cerveceros como son Mahou-San Miguel y Heineken: de 186 medallas en juego, han obtenido 7. Si a éstas le sumamos las medallas obtenidas por las empresas participadas de M-SM, tendríamos 3 más de La Salve, y 4 de Founders. Todo ello significa un 7,5% sobre el total.
Centrándonos estrictamente en las siete medallas de las marcas Mahou, San Miguel y Cruzcampo -un 3,8% del total-, la ruidosa minoría de estas últimas horas, dos medallas han sido en la categoría 2. International Lager, un uso en la elaboración de cerveza propia de las grandes empresas -las cervezas de calabaza tampoco me apasionan, en general, y también tienen categoría-. Las demás se han obtenido en subcategorías que estilísticamente dan paraguas a productos que estas empresas han ido trabajando desde hace tiempo, como son 6A. Märzen y 8. Dark European Lager; tras el giro del interés hacia el lúpulo, también en 12. Pale Commonwealth Beer; y, de manera destacada, en una subcategoría tan propia del craft como 33A. Wood-Aged Beer, en que ha habido oro.
¿'Micción gatuna', que decía aquel? Para quien siga viviendo de los mitos y esoterismos comentados más arriba, me dispongo a compartir una afirmación tan breve como lógica, y es que la utilización de materia prima de primera calidad no asegura que el producto final cumpla con los mismos estándares. El proceso es clave, y en este terreno difícilmente se ganará a quien tiene recursos prácticamente ilimitados para asegurar una ejecución sin imprevistos, y para establecer rigurosos controles de calidad.
Te gustarán más; te gustarán menos: pero con recursos se pueden hacer muy buenas cervezas que, además, abarquen a un gran número de consumidores, como llevan demostrando tantas cerveceras históricas y tradicionales. Ni el arroz, ni el maíz: a la hora de beber cerveza, no hay peor adjunto que los prejuicios.
Visto y dicho lo anterior, a los que queremos la cerveza artesana y que, a nivel personal, nos sentimos algo más que meros consumidores de la misma, ¿tiene que cabrearnos ver que la calidad y variedad de la oferta las cerveceras que producen en masa crece? ¿Que los consumidores de cerveza, en su globalidad, tienen a su disposición mucho mejor cerveza, y más variada, que hace 5 o 10 años? A mí, personalmente, me alegra. En especial, porque me parece un claro triunfo del movimiento cervecero artesanal.
El futuro: la identidad
Llegados a este punto, y tras todas las reflexiones anteriores, podríamos llegar considerar que, a pesar de todo, no es justo que del triunfo de unas se beneficien otras.
Estaríamos, sin embargo, obviando la gran inversión y esfuerzo que llevan dedicando las grandes cerveceras en atajar este problema que se les ha enquistado en la última década, acostumbradas a la calma de un mercado oligopólico que había sido estable durante años, con pequeñas peculiaridades regionales y poco más. Cada grupo cervecero ha interpretado la respuesta que merece este cambio de paradigma a su manera: algunos como una amenaza pura; otros como una oportunidad. Pero todos con la incertidumbre de cuál es la mejor estrategia.
Ante esta situación, y en un momento del tiempo en que abrir un pequeño negocio cervecero no es una novedad, es primordial tener -al menos- un hecho diferencial claro, que te diferencie del resto. Salvo que tengas un ámbito geográfico, enfoque comercial o de producto muy distintivo, carece de sentido hoy en día abrir una nueva cervecera para hacer cervezas lupuladas normales -o mediocres-: las grandes empresas ya las tienen en el mercado, habiéndolas incluso de bastante buenas.
En línea a lo que he mencionado en ocasiones anteriores, hay que buscar el nicho; la especialización. Aprovechar la propia idiosincrasia para hacer aquellos productos que, producidos a gran escala, sin un gran número de consumidores preparados para ellos, son deficitarios. Pensar, como leo a veces, que con la ofensiva actual las macros se comerán a las micros en su conjunto es, en mi opinión, obviar que hay tableros en los que las grandes empresas nunca se van a sentar a jugar.
Analizado desde un plano más filosófico, cabe considerar que la cerveza artesana nació en contraposición a la monotonía y estandarización de la cerveza. ¿Existe, hoy en día, algo más recurrente que una IPA con Mosaic y Citra? Una de las grandes causas identitarias de la cerveza artesana es, desde un inicio, el descubrimiento constante de nuevos sabores y sensaciones, ampliando constantemente el perímetro que delimita la definición de cerveza: empeñarse en hacer IPAs sin ningún hecho diferencial -e.g. algún tipo de giro estilístico, elemento autóctono, o una simple habilidad descomunal en su elaboración- carece de sentido. ¿Queremos ver un sector produciendo siempre lo mismo, aposentado en seguir reactivamente las modas, sin apenas innovación?
Ahora que las cerveceras pioneras van llegando a su adolescencia, es momento de que las micros se pregunten qué quieren ser de mayores.
Estoy convencido de que perseguir la propia identidad, a cada año que pasa con mayor bagaje, conocimientos y riqueza comunitaria, les asegurará un gran futuro colectivo.
Corolario
Para cerrar este artículo -que pretendía ser más corto- sólo destacar que, desde mi punto de vista, los aficionados cerveceros tenemos más motivos para celebrar que para decepcionarnos.
Es en nuestras decisiones de consumo individuales que dibujaremos la oferta cervecera del futuro. Los establecimientos de venta final tendrán las cervezas que su público esté buscando, así que si tanto nos importan nuestras cerveceras, pidamos sus productos en restaurantes, en bares y en tiendas. Ahora más que nunca.
Tal como evidencian una vez más los premios del Barcelona Beer Challenge, calidad no falta.
Salut i birra!
---
Premisas y transparencia
- No he tomado parte en ningún aspecto de la organización ni la ejecución del Barcelona Beer Challenge de este año, si bien me unen años de entendimiento profesional y personal con los responsables de Beer Events, que es la empresa que organiza el certamen.
- Dicho lo anterior, no me jugaría mi reputación como 'comentador' de la industria para defender posturas que no reflejaran mis opiniones personales.
- BBF y BBC son dos líneas de trabajo independientes de una misma empresa, Beer Events.
- Participar en el BBF no otorga ningún beneficio a la hora de participar en el BBC.
- Participar en el BBC puede suponer un beneficio en exposición de marca para la edición siguiente del Festival, en el caso de que haya premios importantes, pero no otorga ningún beneficio inmediato a la hora de participar en el BBF.
- El derecho a tomar parte en el BBC es el mismo para todos los participantes, sin distinción alguna, bajo unas mismas reglas.
- Estas reglas pueden consultarse en el reglamento, junto con otros aspectos de interés como la organización interna y el funcionamiento del BBC.
- Es muy recomendable su lectura para entender aspectos operativos -e.g. desagregación de estilos-, así como para poder expresar opiniones fundadas al respecto, evitando confusiones en aspectos públicos y conocidos.
- El funcionamiento asegura que una misma cerveza pasará, al menos, por la evaluación a ciegas de 4 jueces, llegando hasta 12 en las categorías más competidas.
- La puntuación de una cerveza es fruto del consenso entre todos estos jueces.A pesar de que la evaluación se rige por unos estándares estilísticos, es naturalmente subjetiva; si bien este sistema asegura que la puntuación sea justa.
- Todos los jueces son titulados, y cuentan con experiencia y la pasión necesarias para hacer el trabajo. El panel completo es heterogéneo en procedencia y edad -con el tiempo esperemos que también en género-. Lejos de cobrar dinero, reciben algunos beneficios de cortesía, costeándose la diferencia para asegurar su presencia en la fase de evaluación.
- Dudar de la honestidad de la organización o de los jueces me parece fuera de lugar, y no merece más comentario por mi parte.
Se ha abierto una puerta muy peligrosa al permitir participar a la "industria" en este campeonato... porque siendo así, las marcas de un mismo grupo, ¿¿¿no deberían contar como la misma marca y por tanto acumular todos los puntos en la misma marca empresarial???... se premia por separado a marcas que pertenecen al mismo grupo, que elaboran con las mismas directrices, cuyos equipos mantienen y gestionan los mismos y que generan beneficios a los mismos propietarios... No hay por dónde cogerlo, lo mires por donde lo mires... todo lo demás es justificar que la industria pueda elaborar y venderse como artesanal. Una pena para el sector
ResponderEliminarLos grupos cerveceros acumulan medallas, no va por marcas. Fíjate que la medalla de San Miguel se suma a las de Mahou. Empresarialmente, La Salve y Founders son empresas distintas, sobre las que el Grupo M-SM tiene una participación no mayoritaria. Si cambiamos de sector, como ejemplo ilustrativo, La Caixa tuvo una participación minoritaria sobre Banco Sabadell a principios de siglo, pero nunca han sido el mismo banco, ni han contado sus resultados conjuntamente. Espero haberlo aclarado.
EliminarEn mi opinión creo que es un arma de doble filo que va zigzagueando sobre un hilo, es decir, la industria cervecera lleva dispuesta desde hace cierto tiempo nuevamente a entrar poco a poco en el sector o escena craft, en un futuro veremos si no son spónsors directos de cualquier festival de cerveza artesana, dispuesta a vender en grandes superficies cervezas sobretodo de estilo IPA o Session IPA, perfilando el sabor y aroma, son sabedores que hay brecha en el mercado y ofrecen una cerveza similar a una artesana a un precio más moderado para el bolsillo del consumidor digamos que diario. Sin entrar en debate si está bien o mal....creo que juegan con cierta ventaja sobre una micro. Pero finalmente creo que el producto final que ofrece una micro consagrada está por encima del producto que es puesto en el mercado por los grandes grupos cerveceros. Es un ejemplo que voy a mencionar sin decir marca....voy a una bodega donde hay 4 tiradores de la misma marca....lager, una negra, una más tostada y ahora añade una ipa....el cervecero artesano que no puede beber otra cosa que no sea cerveza industrial de esa marca que será lo que se pida? (Siempre y cuando le gusten las ipas).
ResponderEliminarPara bien o para mal....ahí estarán.
Mi opinión es que jugar al mainstream, que es lo que tienen que hacer por estructura los grandes grupos, merece renuncias. En esas renuncias es donde tienen el nicho las artesanas, y el que deben aprovechar. Hay sitio para todos, porque muchos consumidores nunca van a querer pagar más de 2€ por una cerveza, y estamos algunos otros que no nos importa pagar por una cerveza mientras el resultado nos compense el gasto. El otro tema, que siempre me ha generado dudas es: ¿a quién beneficia que las grandes empresas enseñen a sus consumidores que la cerveza es algo más de lo que siempre habían tomado? Saludos.
EliminarMuchas gracias por tu vision joan, y un fuerte abrazo desde madriles
ResponderEliminarVoy con un par de puntos discrepantes
Se olvida aclarar una cosa, o no la he entendido bien, ¿cual es el propósito del bbc? Porque si quedara claro que es un concurso de cualquier cerveza a nivel nacional segun los estilos del bjcp, lo mismo no habria tanta polemica, o bueno, si está claro, pero no empezó asi y de golpe y porrazo vemos a grandes grupos cerveceros que ademas PATROCINAN O HAN PATROCINADO EL EVENTO, cruzcampo con tirador fijo por ejemplo y publicidad. Ahi deberia tenerse cuidado por cuestion de imagen mas que nada
Y respecto a la visión negativa sobre las macros, parece que se nos olvida los boicots de macros en eventos y ferias patrocinadas a marcas independientes, sus practicas, con las nuevas y marcas afines también de dumping y compras obligadas de stock... la competición no es de igual a igual, ni con las mismas intenciones en mi opinión
Por ultimo, claro que las macros pueden hacer buena cerveza, pero no es la que ofreceran en el lineal, ni en el bar, son cervezas de concurso que dan medallas para que el consumidor menos versado piense que bebe cerveza de calidad, cuando, a no ser que beba exactamente la presentada, lo dudo viniendo de una macro. En cambio edge o peninsula no presentarán grandes diferencias entre lo presentando y lo que se vende
Cuidaos todos, y esto va desde el respeto que tengo a joan y mikel
Salud!
Buenas Fer, un abrazo también desde aquí, qué ganas tengo de veros por ahí otra vez :-).
EliminarComo comento en las premisas, BBC y BBF son dos cosas distintas, organizadas por la misma empresa. Los sponsors de BBF no esponsorizan nada en BBC. En cuanto a BBC, que es sobre lo que va el post, creo que nunca se ha presentado como concurso de cerveza artesana.
El tema de boicots, ya lo comento: veo virtud en no cometer los mismos errores. Eso no quita que yo, personalmente, en mis decisiones de consumo estas cosas las considere. Igual que considero las prácticas que no me parecen adecuadas por parte de artesanos, que también se dan.
Del último punto, los concursos están siempre expuestos a que se presenten cervezas bajo un nombre y apellidos, y que esta no sea la versión que se encuentra ahí fuera; es cierto. Pero a modo de ejemplo, a mí la Maestra Dunkel me pareció muy buena cerveza la última vez que la probé (comprada en Carrefour, o ECL, no recuerdo), y el premio me parece justo.
Un abrazo macho, y gracias por comentar y aportar buenos puntos.
BUENAS JOAN. NADA QUE OBJETAR AL TRABAJO DE LOS JUECES PERO COMO DICE FER, APARTE QUE NO SE QUÉ SE BUSCA EN UUNuN CONCURSO DE ESTE TIPO (CON UNA CASCADA DE MEDALLAS DIGNA DE UNA TRAGAPERRAS) MAS ALLÁ DEL RECONOCIMIENTO DE PRODUCTOS ARTESANOS DIGNOS DENTRO DEL SECTOR, QUE AL ENTRAR LAS MACROS PIERDE TODO SU SENTIDO DE EXISTIR, EL FUTURO DE LOS MISMOS SERÁ EL DE FORZAR LOS MECANISMOS DEL MISMO PARA SACAR LOTES EXPROFESO PARA EL CERTAMEN.
ResponderEliminarINSTO DESDE AQUI A LOS JUECES QUE HAYAN PARTICIPADO A CONSEGUIR ESAS CERVEZAS PREMIADAS CRITICADAS EN SUS PUNTOS DE VENTA Y VALORARLAS (NO ME VALE LO DE QUE NO SIGUEN LA MISMA CADENA DE CONSERVACIÓN, ESO UN JUEZ ES CAPAZ DE DISTINGUIRLO Y EVALUARLO, NO ES IGUAL UNA CERVEZA "MALTRATADA" QUE UNA RECETA DISTINTA)
POR CIERTO, TANTA "PREMISA Y TRANSPARENCIA" Y TANTA VELOCIDAD EN PUBLICAR Y "ACOMODAR" UNA OPINIÓN (LA QUE SEA) NO JUEGA A FAVOR DE TU REPUTACIÓN.
UN SALUDO COMPI ;)
Buenas Jorge. El tema de las medallas es el de cada año, y va en función de la participación que haya por categorías. ¿Qué hay muchas? Entiendo que la idea es reconocer la calidad, pero también la variedad de las cervezas, haciendo uso de la riqueza estilística y del abanico de estándares contemplados por BJCP. Se puede compartir o no el objeto, cómo funciona, y lo que implica todo ello; pero entendidas las reglas es lo que hay, y lo que habrá en cada edición salvo que cambie el enfoque.
EliminarLo de conseguir las cervezas fuera de concurso, lo mismo que he comentado con Fer: todo concurso esta expuesto a ello, pero por ejemplo a mí la Maestra Dunkel me pareció una buena cerveza no hace tanto. Luego el cuidado en la canalización y comercialización es cierto, pero también por parte de las artesanas, mal que nos pese: comprar cerveza artesana en según que colmado puede ser un deporte de riesgo.
El último comentario la verdad es que me duele bastante. Eres buen conocedor de la cerveza y del sector, y además te aprecio. La velocidad, tú que hace años que sigues lo que escribo, sabes que es algo que en temas de actualidad la hago a menudo. Hablar de esto de aquí a dos semanas tiene mucho menos impacto que al día siguiente.
Acomodar... en fin. Trato de ser transparente, diciendo que soy amigo y colaborador de Beer Events para quien no lo sepa, si bien se puede en efecto pensar que hay otras causas más allá de mi voluntad de comentar temas de relevancia para el sector detrás de mi post. Aquí ya es cada cual y su confianza hacia mi honradez.
Un saludo.
Joan, un placer leerte como siempre. Aunque en esta ocasión no esté de acuerdo.
ResponderEliminarDebemos de tener cuidado con la piel de cordero porque sino podríamos perder todo lo andado en estos últimos 15 años.
Me explico, ¿quieren cuota de mercado o quieren birra de calidad?.
Nosotros vendiamos en algún lugar porque ofreciamos calidad y variedad, ahora esa variedad ya la cubren con cervezas de grandes grupos con rapel y demás beneficios.
Un abrazo
Hola Joan, tu exposición me parece muy correcta y entendible. Pero hay un par de puntos en los que discrepo, uno es que ese público no Craft del que hablas y que sería muy cuantitativo para el mercado de las artesanas, al final nos están quitando una importante cuota de mercado. En relación al mercado está el otro punto, y es que no estamos ante un mercado de competencia perfecta, con un 1% o 2% de las artesanas y 4 grandes grupos cerveceros restantes estamos ante un oligopolio en el cual ellos no juegan limpio, como todos sabemos. Desde nuestra parte, y entiendo que el bbf o el BBC están en ella debemos no solo defendernos, sino también atacar mediante todas las armas, si les damos pábulo de algún modo jamás podremos competir con ellos, es evidente que sus recursos son ilimitados y por supuesto pueden hacer cervezas de muy alta calidad aunque solo sea para presentarlas a un concurso. La cuestión es, ¿Queremos un mercado atomizado? O que las artesanas sigamos rozando unas décimas al porcentaje del consumo. Creo que todos como consumidores/organizadores tenemos una responsabilidad que va más allá del propio producto y es construir una sociedad mejor, si es que la queremos. Y para ello hay que ir más allá de lo que aparece en el envase o botella de aquello que compramos. Y no estoy diciendo que haya que tomar mala cerveza porque sea de tu pueblo, pero de algún modo tenemos que defender a lo pequeño de lo grande. De otro modo y extrapolando a todos los ambitos, ¿que tipo de economia estamos fomentando? Te respondo, aquella en la cual el que tiene capital, cada vez tiene más y el que no tiene capital está sujeto a las normas del que lo tiene. Un saludo.
ResponderEliminar