Y al final llegué a Europa...
Nubecitas y casitas decoran el espacioso local de la Cervecería Europa. |
Pude salir medianamente temprano de trabajar y, después de dejar las cosas en el hotel, nos dirigimos con mi compañero Cristian a la zona de Bilbao. Fuimos directos a la Cervecería Europa, donde había varias mesas libres, por lo que esta vez no tuvimos problema para entrar.
El local es bastante amplio, con una decoración curiosa y divertida. Cristalería oficial para cada cerveza (o al menos para la mayoría de ellas) y ocho grifos para escoger. Al sentarte te dirven enseguida un surtido de ganchitos y patatitas fritas diverso, enemigos del cervecero que entra para degustar bien una cerveza, pero buenos compañeros de charlas y previos de cena.
Dado que antes de empezar a beber cerveza soy un animal más o menos racional, descarté el menú que incluye barra libre de cerveza de barril, pensando que tengo muchos días por delante para acercarme, y que además al día siguiente tocaba currar como un campeón. Aún así, con las cervezas que tienen en carta, la barra libre de Leffe, Hoegaarden y alguna otra podía esperar fácilmente.
Me había dejado mi saca-chapas oficial en casa (después del viajes a Amsterdam, del que voy a postear cuando tenga las fotos disponibles, se había quedado en la maleta), así que pensé que nada mejor que tomar unas Samuel Smith (que no tienen chapa personalizada, por desgracia) aprovechando la variedad que tienen en la Cervecería Europa.
Así pues, tomé primero una Samuel Smith Pure Brewed Lager. Suave, afrutada, con un paladar de excepción; fue una buena introducción para luego atacar las hamburguesas alsacianas que iba a compartir con Cristian. Se pueden encontrar lagers mucho mejores, por supuesto, pero es una buena cerveza, y una curiosidad siendo producida por una cervecera inglesa como la de Tadcaster.
Luego tiré por una de oscurita, la Taddy Porter, que emepezó un poco apagada e iba ganando a medida que iba bebiendo. Se trata de una porter simple, sin peripecias, pero muy bebible y, nuevamente, con muy buen paladar. Chocolate, regaliz y suaves pero notables toques lupulados eran sus mayores atributos.
Podría haber tomado unas cuantas más, pero mejor reservarse para otras ocasiones. Tanto la Lager como la Porter son cervezas muy fácilmente "sesionables" (si me admitís el palabro); quizás no sean las mejores para la comida de hoy, pero debía probarlas dada la ocasión. Supongo que tenía la sensación que la Taddy sería más intensa.
Y hasta aquí mi primera, que no última, experiencia en la Cervecería Europa. El sitio es muy interesante por la comida, con una muy buena relación calidad-precio. Cervecísticamente no son tan pulcros en los detalles como en Oldenburg para mi gusto, pero se pueden compaginar alegremente ambos locales en una misma noche, estando los unos al lado de los otros.
Buen sitio, en la zona más cervecera de todo Madrid, al que suelo ir con frecuencia, siempre que mis obligaciones me lo permiten. No tienen mal surtido de cervezas, aunque echo de menos las estadounidenses que tenían en carta hace algún tiempo. Ahora tienen alguna Anchor, la Samuel Adams, y poco más. Pero hace algún tiempo tuvieron un buen surtido de Flying Dog, y algunas Great Divide. Por la zona tienes aparte del Oldenburg y el Nuevo Oldenburg, el Kloster y la Casa de la Cerveza, este último con una amplia variedad de grifos, pero sensiblemente más cara. Para cervecerías en Madrid, también está muy bien la Alquitara, aunque no está tan céntricamente situada. Salu2!
ResponderEliminarVaya hombre, yo contaba con que tendrían las Flying Dog que vi en su website... una lástima. Pero como bien dices, su surtido no es, para nada, despreciable.
ResponderEliminar¡Muchas gracias por las demás sugerencias! Nunca me había gustado tanto que me pusieran deberes :-).
He de reconocer que tengo unas ganas locas de visitar ese local por la decoración esa de las nubecitas y las casas... ¡Espectacular!
ResponderEliminarEs buenísimo, da la sensación de ser un belén muy currado tamaño natural, pero en lugar de corderos hay birras ;-)
ResponderEliminarEs un sitio estupendo para tomar cerveza y si lo acompañas con algo de comer...
ResponderEliminarAquí probé por primera vez la Jacobite. Desde entonces no falta en mi nevera.
¡Ya lo creo! Es una lástima, aún así, que hayan reducido la carta, tal como apunta JAB. Un saludo compañero extremeño :-)
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