Un esperado anuncio...

Antes de irme de vacaciones, pude leer una noticia que me entusiasmó: antes de finalizar el año (y según me han comentado, dentro de nada) parece que vamos a disponer de cervezas de la Brooklyn Brewery gracias al acuerdo comercial de importación al que han llegado con los distribuidores Crusat. Concretamente, así de entrada, vamos a empezar a ver las cuatro siguientes birras: la Brooklyn Lager, la Brown Ale, la East India Pale Ale y la Local 1. Tuve el placer de probar dichas cervezas en un bonito viaje a Nueva York, y es algo que espero repetir en breve (probarlas... ¡el viaje ya me gustaría!).

Especial predilección tengo por la Local 1, una cerveza que pude comprar a última hora en un súper 24h y que me traje "de recuerdo" para casa. Me sorprendió muy gratamente desde el punto de vista conceptual, a medio camino entre una Tripel y una Saison, y por supuesto el gustativo. Se trata de una cerveza llena de sorpresas, empezando por su refermentación en botella, al estilo de algunos de los mejores champagnes. Raso y corto, pasada su primera fermentación, la levadura se filtra y, una vez en la botella, se le añade azúcar y levadura "nueva" para que vuelva a fermentar.

De hecho, con su imponente y elegante presentación ya se puede intuir que no estamos ante una cerveza cualquiera. Al sacar el tapón de corcho, un inesperado humo (al más puro estilo cava o champagne) da la bienvenida al cervecero, que al verterla en la copa puede llegar a dudar sobre el tipo de bebida que contiene la botella. En la copa vemos un líquido dorado, brillante, algo turbio; muy carbonatado y con una espuma muy consistente que nos acompaña hasta el final y nos obsequia con un lacing de campeonato.

El aroma y el sabor nos dejan un sinfín de matices, con un carácer bastante frutal, sobretodo con notas de plátano y cítricos, acompañado de suaves notas herbales, de especias y un buen toque de levadura. Con un contenido alto en alcohol (9%), muy bien integrado si bien no escondido, su sabor me recuerda el de un buen ron añejo. El retrogusto es largo e intenso, con un toquecillo de pimienta.

Yo no sé vosotros, ¡pero yo voy a llevarme unas cuantas cuando las vea por nuestras tiendas de aquí! Espero que sean las primeras de muchas cervezas de Garrett Oliver que visiten nuestras soleadas tierras.

Salut!

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