4to #FFdA - Resumen y próximos pasos...
Después de sobrevivir a los primeros atracones de fiestas sin vesícula y a una maldita gripe que se empeña en seguir conmigo casi dos semanas después de incubarla (y que por ejemplo me ha impedido, desgraciadamente, participar en el #LNMO de los amigos del Observatorio Cervecero, entre tantas otras cosas) retomo poco a poco el ritmo nuevamente con la publicación del resumen de la cuarta edición del Finde Fondo de Armario (4to #FFdA).
Como bien sabéis, en esta edición hice un llamamiento a mostrar cómo son nuestros armarios o sitios donde almacenamos las cervezas víctimas de este tipo de convocatorias, además de pedir cierta ambientación de mobiliario o decoración casera para darle autenticidad al contexto visual. Pero antes de explorar esta parte más voyeurista, veamos qué ha dado de sí el #FFdA en su sentido original y clásico.
Como bien sabéis, en esta edición hice un llamamiento a mostrar cómo son nuestros armarios o sitios donde almacenamos las cervezas víctimas de este tipo de convocatorias, además de pedir cierta ambientación de mobiliario o decoración casera para darle autenticidad al contexto visual. Pero antes de explorar esta parte más voyeurista, veamos qué ha dado de sí el #FFdA en su sentido original y clásico.
El Resumen:
Debut, desde Una Bien Fría, de Cristóbal en el #FFdA con tres cervecitas, dos de ellas inéditas hasta ahora en las distintas convocatorias: empezó con la Evil Twin Noma Oxalis, a puntito de caducar, famosa por ser la cerveza de un restaurante galardonado con dos estrellas Michelin (el Noma de Copenhague). Exquisita, ligera y amarga. Siguió una valenciana afrutada como la Galana Albaricoque, "sobre la bocina" de caducidad, de la que se destacan sus buenas cualidades para cazar a neófitos cerveceros. Finalmente, una apuesta más que segura y efectiva como la Rochefort 10, compleja, cremosa... y deliciosa, qué caray; qué fácil olvidarse de los clásicos, y qué difícil superarlos. Buena triple selección para una primera participación.
Debut, desde Una Bien Fría, de Cristóbal en el #FFdA con tres cervecitas, dos de ellas inéditas hasta ahora en las distintas convocatorias: empezó con la Evil Twin Noma Oxalis, a puntito de caducar, famosa por ser la cerveza de un restaurante galardonado con dos estrellas Michelin (el Noma de Copenhague). Exquisita, ligera y amarga. Siguió una valenciana afrutada como la Galana Albaricoque, "sobre la bocina" de caducidad, de la que se destacan sus buenas cualidades para cazar a neófitos cerveceros. Finalmente, una apuesta más que segura y efectiva como la Rochefort 10, compleja, cremosa... y deliciosa, qué caray; qué fácil olvidarse de los clásicos, y qué difícil superarlos. Buena triple selección para una primera participación.
De una de fría, a una al día con el corresponsal ffdaero por tierras germanas. Diego sacó una cerveza que llevaba esperando su momento de gloria patillera desde la primera edición de esta convocatoria, y que no pudo colarse finalmente en la segunda. La Rodenbach Vintage 2009, auténtico Fondo de Armario, es definida como capricho de los que merecen la pena, y aunque estuviera muy buena reconoce que en una cata a ciegas con otras Rodenbach le costaría reconocerla. Por ser un auténtico vinagrero ante una ácida dulzona, el muy sacrílego la compara con los kalis + licor de mora que parece le atrofiaron los sentidos en su juventud. Sirvió como segunda cerveza para comparar, en versión barril, su hermana envejecida Rodenbach Grand Cru.
L'amic Txema, por su parte, tuvo una participación amarga, pero desgraciadamente no por IBUs sino por culpa de algún mal moniato. Todo empezó bien, entre amigos, en una presentación cervecera en La Boutique, pero acabó con un triste acontecimiento mediático. Con previsión, no obstante, Txema pudo sacarse una fantástica Cuvée de Ranke, cambiante a cada trago, y una Effenbert caducada de hace 2 años como fondera auténtica (aunque, para darle más épica, no fue sacada del fondo de un armario, sino de un vertedero a pleno sol). ¿Será culpa de las birras añejas que tanto él como yo acabáramos 2013 sin vesícula biliar? Curiosa sincronización...
Por su parte, Rodrigo apostó por una sola cervecita para la ocasión. Muy en línea a sus conocidas tendencias maltosas, la Yorkshire Stingo de Samuel Smith hizo las delicias del jardinero, que destaca de la cerveza en cuestión su sabor a fruta, toffee y pastelería, con el punto de madera característico de esta birra "sabrosa y especial", que puede envejecerse más tiempo sin ningún problema.
Por su parte, Rodrigo apostó por una sola cervecita para la ocasión. Muy en línea a sus conocidas tendencias maltosas, la Yorkshire Stingo de Samuel Smith hizo las delicias del jardinero, que destaca de la cerveza en cuestión su sabor a fruta, toffee y pastelería, con el punto de madera característico de esta birra "sabrosa y especial", que puede envejecerse más tiempo sin ningún problema.
En Visual Beer, Rubén sacó un buen arsenal del armario, empezando por una La Binchoise Special Noël que "había ganado con el tiempo", y siguiendo con la Old Man Winter Ale de Southern Tier, que perdía la partida con la primera. Entonces vino la rara Krones Eifeler Landbier, traída en julio desde tierras germanas y casi siendo, de esta manera, un fondo de armario a la alemana dadas sus exigencias de consumo pronto; la Winter Lager de Samuel Adams, caducada pero "muy rica e idónea" y, por último, la Porter de Southern Tier, caducada de hacía un par de años. Según nos comenta Rubén, los años de guarda le habían sentado fenomenal. Cinco cervecitas en el debut... esto es empezar con buen pie.
El turno ahora es de Jose (Teddy), que se marcó un post muy simpático compartiendo su pasión coleccionista con todos. Durante su celebración, cayeron tres cervezones de los que dan envidia sana: de Hornbeer la Caribbean Rumstout, que incluso gustó más que su versión en barril, probada anteriormente por buenos sitios madrileños; la segunda, que estaba en su poder fruto de uno de sus intercambios cerveceros, fue la The Lost Abbey Mayam Apocalypse Judgment Day, densa, cremosa, con notas a caramelo y toffee entre muuuchos otros matices; y finalmente, la que finiquitó el festín fue una lámbica, dentro de los buenos propósitos que se había marcado para 2013. La Cantillon Iris, de 2012, que en este caso era una FdN (Fondo de Nevera), resultó ser bien ácida, pero muy bebible.
Fernando Sánchez, en un arrebato de ansiedad, ¡celebró su jornada de cervezas fonderas dos semanas antes de tiempo! Así, el 15 de noviembre se sacó una Guinea Pigs! 95 de la segunda hornada, resinosa y amarga, con notas de madera y whisky. Gran birra nacional, y gran compañero birrero madrileño que es Fernando. Destacar, fuera de convocatoria, que desde hace poco podéis seguir las "cutre catas" marca de la casa en la nueva página de Facebook "Birras a Tutti".
Desde Amante del Lúpulo, Gonzalo y Álvaro estaban inmersos en un periodo de "trabajo y estudios", pero no dejaron escapar la oportunidad de sacarse algún birrote para el #FFdA. En este caso, se la jugaron a dos cartas: venida de Norteamérica, la The Lost Abbey Red Poppy Ale, para amantes de lo ácido, y con una sutil influencia de las cerezas con las que envejece en barrica de roble; y desde Escocia, una vieja conocida del Finde Fondo de Armario como la Brewdog + The Lost Abbey The Lost Dog, "la mejor Imperial Porter" probada según nos comentan los amantes. Corto, pero sin duda intenso.
Nunca deja indiferente el siempre-ansiado post de Carlos Portolés en Cerevision. Él celebró el #FCFDCA(CP)QEPPARDLC(CSUA) (para más detalles, os remito a su entrada), aunque a punto estuvo de caerse por motivos de salud. No obstante, como ya nos tiene acostumbrados, se pego una sesión de auténtico maestro ffdaero: Hoppe Artisanale Pils de Van Steenberge (2011), Belle-vue Gueuze (1997), Strubbe Vlas Kop (1998), Lefebvre Moeder Overste (1997-1998), Crombé Egmont (1997), Slaapmutske Winterbier (2000) y Sint-Sixtus Abdij Westvleteren 8 (2000). Cabe destacar que compartió la velada con un -muy afortunado- amigo, después de una previa en la que pudo encender luces de navidad con los Castellers de Sabadell y tomarse unas cuantas birras en Moixeró. Sana, pero envidia al fin y al cabo.
David y Débora tienen un outsourcing contratado para el almacenamiento de cervezas, y para la presente ocasión se dirigieron a uno de los centros de externalización a buscar cervezotes. Empezaron con acidez, y de manera casi análoga a Diego (unas líneas más arriba): Rodenbach Grand Cru y Rodenbach Vintage de 2011, entre las que no encuentran gran diferencia, contando ambas con su aprobación, gusto y recomendación. La última, la Speedway Stout de Alesmith, es una de las pocas cervezas que cuenta con el honor de haber estado mínimamente añejada en casa de los observadores, siendo impresionante y potente, pudiendo llevar a según quien a cantar villancicos con un ukelele de manera posesa. Recomiendo que os paséis por el post por la bonita impresión visual de las fotos.
En el blog de Humulus Lupulus, Gonzalo empezó su participación con una de las Anchor Christmas de los últimos años; concretamente la de 2011. Guardaba buenos recuerdos de ella, y aunque estaba pasada de fecha parece que satisfizo al compañero Gonzalo, con su perfil marcadamente especiado y maltoso. Finalizo su cuarta edición con una sorpresa que se encontró en el armario: la Zombreaker de Zombier y Naparbier, que fue elaborada para celebrar el primer aniversario de la distribuidora. Aunque los lúpulos no estaban en su mejor momento, su evolución casi hacía recordar una Barley Wine.
Roger se vio, una vez más, perjudicado por mi flagrante mala intención a la hora de fijar fechas para dificultar su participación en la convocatoria. Pero finalmente pudo sacarse dos grandes cervecitas como la Struise Pannepot de 2010, para tomar con calma, calificada como "casi obra de arte", y que incita a nuestro compañero a seguir cierto ritual que estima que muchos tenemos cuando vamos a tomarnos cervezones. Siguió la Dougall's DUB, que es la Raquera "maqueada" para el festival de La Concha Reggae Vibes, celebrado este agosto. Con casi medio año, las cervezas de Andrew y Kike bien sabemos que se pueden considerar fonderas (y sino, a sus etiquetas me remito). Avanzar que, como de costumbre, la próxima convocatoria será para el último fin de semana de mayo (¡yo ya he avisado!).
También desde Catalunya, el compañero Oliver demostró sus buenas prácticas monógamas apostando por una sola acompañante para su #FFdA: la De Molen Hemel & Aarde Bowmore / Caol Ila Barrel Aged (un poco más largo el nombre y me ocupa toda la entrada). Densísima y espectacularmente llena de matices, la compara con la Black Mes de Struise, aunque con un "golpe" de Islay más potente.
Pau tuvo en su cuarto #FFdA su edición más añeja (y vinosa, añadiría). Empezó a la luz del fuego con una Tramuntana Cuvée de Popaire, adquirida en el primer Fes-t'hi de Vilanova, que fue "una gozada", a camino entre cerveza y vino dulce, y con potencial recorrido adicional de no habérsela pimplado. Desde tierras canadienses, cayó una Péché Mortel de Dieu du Ciel!, una Imperial Stout que esconde sus 9,5% y que se presenta agradable, lejos de las bombas de sabor y potencia que últimamente se llevan. Finalizó con una cerveza que llevaba escondida desde 2011, una Mikkeller Mielcke & Hurtigkarl, de estilo belga y envejecida 6 meses en barrica de vino blanco dulce Château d'Yquem, estilo que tiene robado el corazón verde de Pau, y que otorga un carácter peculiar al global de la cerveza.
A diferencia de los demás participantes, Albert quiso participar por la vertiente exhibicionista de esta cuarta edición. Realmente, en verano se pimpló su fondo de armario, y es por eso que nos comenta que su primera elección fue la Trooper de Iron Maiden y Robinsons, que fue adquirida nada más aterrizar esta cerveza a la ciudad condal, y que fue degustada junto a una figurita freak de Eddie mientras atacaba con la guitarra los acordes iniciales melodía que da nombre a la cerveza. Como segunda cerveza, cayó la Verdi Black Jack Ilsay 2002 de Birra del Ducato, "de 45 minutos" y que deja con sensación de tristeza mientras va consumiéndose (¿depresión alcohólica?).
A continuación, el turno de Dámaso, que se lo tomó en serio con cinco cervecitas, belgas cuatro de ellas. Aún así, empezó con una de polaca (de Polonia, ojo) una Komes Porter Baltycki, guardada desde hacía un año, y calificada de "brutal". Ya entre balones y flamencos, siguió con una Struise Tsjeeses BBA Vintage 2011, un seguro de birra al que no pudo resistirse, y ya en terreno ácido cayó una Geuze Boon adquirida en la ya -desgraciadamente- difunta Maison Belge de Gracia. Como guinda, dos Bush distintas: una Ambrée caducada de 2010 ("todo un licor de peras") y la Cuvée Special de 2010, añejada en barricas de borgoña 9 meses, y compartida con su mujer para mayor satisfacción.
Tengo mis dudas de que entiendan, después de cuatro ediciones participando, el sentido del Finde Fondo de Armario en Cervecearte. Andrés y Mireia sacaron un arsenal de cervezas muy apetitosas, donde abundaban las... ¿¡jóvenes!? Con un mes de envasado, cayó la Firestone Union Jack IPA; también fresquita, la Real Ale Lost Gold IPA; recién chapada, la Hop Doom de Naparbier; y, aunque no especifiquen, dudo que fuera muy añeja la Ballast Point Sculpin IPA. ¿Creéis que les gusta el lúpulo? Para compensar su indisciplina, tomaron una 100% Gueuze Lambic Bio de Cantillon, y se copiaron (porque se la copiaron) la Alaskan Smoked Porter de un menda.
Con título al estilo hollywoodiense, Jorge nos relató su experiencia ffdaera a partir de tres cervezas y un plato de carne en salsa que le salió bastante carete, y es que la Emelisse White Label que esperaba su turno para esta convocatoria sufrió un pequeño accidente domestico... Cayeron, sin embargo, tres otras buenas cervezas como la Zombreaker, que a diferencia de Gonzalo encontró muy en forma aún, y poco evolucionada hacia Barley Wine. Siguieron -jódete- una Orval caducada de 2006, y que su mala guarda condenó a irse por el fregadero; y una cerveza, la Mikkeller Walk on Water que, por miedo, seguía ahí desde hacía tiempo, que resultó muy empalagosa. Balance irregular con doble decepción y un funeral. Si queréis echaros unas risas, de verdad, leeros la entrada entera.
JAB eligió un dúo clásico de esta convocatoria virtual para su cuarta participación. Por una parte, la Rodenbach Grand Cru; por otra, la gran Vintage Ale de Fuller's. Muy bien escudadas antes de ser consumidas, la primera fue afrutada, compleja, suave... una cerveza que estuvo en este #FFdA por varios motivos, pero especialmente después de una buena experiencia en la Belgian Beer Weekend. La inglesa, una gran cerveza "de sillón y chimenea", conquistó al autor de La Cerveteca con sus matices afrutados y dulzones. Termina el deliciosamente detallado post destacando la dosificación a la que se sometió por la cercanía de esta edición con las fiestas navideñas.
Una, pero qué una, eligió Hugo desde el histórico blog Hipos Urinatum. Recuperado para esta cuarta edición, Embracing Darkness volvió a elegir una cerveza estadounidense para ayudar a descongestionar sus reservas; concretamente, la Clown Shoes Blaecorn Unidragon, "una gran elección" muy equilibrada y con unos 12,5% muy bien integrados, aunque naturalmente muy potente y parecida a un licor. Con la descripción dada, entran ganas de probarla.
El penúltimo participante también se la jugó a una, pero en este caso belga. Dani, muy conocido por sus geniales vídeos en CerveTV, se metió entre pecho y espalda una buena birra de la Brasserie de la Senne: la Tripel Verschueren, que describe como muy fina pese a no ser precisamente amante de este estilo clásico de Bélgica.
Como reglas hay poquitas en este invento que es el #FFdA, pasada la convocatoria tuvimos un último participante: Francisco Javier, desde Cervezas Nacionales. En su curiosa experiencia, pudo tomarse una Vondel que había regalado a su hermana 10 años antes, rememorando así grandes vivencias en una cervecería de Aranda de Duero, donde adquirió la muy fondera cerveza. "Como encontrarse un billete de 20€ en un viejo abrigo".
Por mi parte, como ya pudiste ver en las dos entradas (1 y 2), saqué cervecitas notablemente añejas para la ocasión. "La Vieja" Ardenya de Guineu, "La Navideña" Ales Agullons Setembre Especial Nadal, "La Comprada" Alaskan Smoked Porter y "La Lujosa" Italian Strong Ale de Toccalmatto fueron las elegidas para esta cuarta edición del #FFdA, que pude compartir con la familia y con restricciones alimentarias que no me permitieron apostar por un acompañamiento sólido para los buenos líquidos tomados.
Y hasta aquí, todo lo que se daba...
Fondos de Armario, interiorismo y I Premio Interiorista-Patillero
Fernando Sánchez, en un arrebato de ansiedad, ¡celebró su jornada de cervezas fonderas dos semanas antes de tiempo! Así, el 15 de noviembre se sacó una Guinea Pigs! 95 de la segunda hornada, resinosa y amarga, con notas de madera y whisky. Gran birra nacional, y gran compañero birrero madrileño que es Fernando. Destacar, fuera de convocatoria, que desde hace poco podéis seguir las "cutre catas" marca de la casa en la nueva página de Facebook "Birras a Tutti".
Desde Amante del Lúpulo, Gonzalo y Álvaro estaban inmersos en un periodo de "trabajo y estudios", pero no dejaron escapar la oportunidad de sacarse algún birrote para el #FFdA. En este caso, se la jugaron a dos cartas: venida de Norteamérica, la The Lost Abbey Red Poppy Ale, para amantes de lo ácido, y con una sutil influencia de las cerezas con las que envejece en barrica de roble; y desde Escocia, una vieja conocida del Finde Fondo de Armario como la Brewdog + The Lost Abbey The Lost Dog, "la mejor Imperial Porter" probada según nos comentan los amantes. Corto, pero sin duda intenso.
Nunca deja indiferente el siempre-ansiado post de Carlos Portolés en Cerevision. Él celebró el #FCFDCA(CP)QEPPARDLC(CSUA) (para más detalles, os remito a su entrada), aunque a punto estuvo de caerse por motivos de salud. No obstante, como ya nos tiene acostumbrados, se pego una sesión de auténtico maestro ffdaero: Hoppe Artisanale Pils de Van Steenberge (2011), Belle-vue Gueuze (1997), Strubbe Vlas Kop (1998), Lefebvre Moeder Overste (1997-1998), Crombé Egmont (1997), Slaapmutske Winterbier (2000) y Sint-Sixtus Abdij Westvleteren 8 (2000). Cabe destacar que compartió la velada con un -muy afortunado- amigo, después de una previa en la que pudo encender luces de navidad con los Castellers de Sabadell y tomarse unas cuantas birras en Moixeró. Sana, pero envidia al fin y al cabo.
David y Débora tienen un outsourcing contratado para el almacenamiento de cervezas, y para la presente ocasión se dirigieron a uno de los centros de externalización a buscar cervezotes. Empezaron con acidez, y de manera casi análoga a Diego (unas líneas más arriba): Rodenbach Grand Cru y Rodenbach Vintage de 2011, entre las que no encuentran gran diferencia, contando ambas con su aprobación, gusto y recomendación. La última, la Speedway Stout de Alesmith, es una de las pocas cervezas que cuenta con el honor de haber estado mínimamente añejada en casa de los observadores, siendo impresionante y potente, pudiendo llevar a según quien a cantar villancicos con un ukelele de manera posesa. Recomiendo que os paséis por el post por la bonita impresión visual de las fotos.
En el blog de Humulus Lupulus, Gonzalo empezó su participación con una de las Anchor Christmas de los últimos años; concretamente la de 2011. Guardaba buenos recuerdos de ella, y aunque estaba pasada de fecha parece que satisfizo al compañero Gonzalo, con su perfil marcadamente especiado y maltoso. Finalizo su cuarta edición con una sorpresa que se encontró en el armario: la Zombreaker de Zombier y Naparbier, que fue elaborada para celebrar el primer aniversario de la distribuidora. Aunque los lúpulos no estaban en su mejor momento, su evolución casi hacía recordar una Barley Wine.
Roger se vio, una vez más, perjudicado por mi flagrante mala intención a la hora de fijar fechas para dificultar su participación en la convocatoria. Pero finalmente pudo sacarse dos grandes cervecitas como la Struise Pannepot de 2010, para tomar con calma, calificada como "casi obra de arte", y que incita a nuestro compañero a seguir cierto ritual que estima que muchos tenemos cuando vamos a tomarnos cervezones. Siguió la Dougall's DUB, que es la Raquera "maqueada" para el festival de La Concha Reggae Vibes, celebrado este agosto. Con casi medio año, las cervezas de Andrew y Kike bien sabemos que se pueden considerar fonderas (y sino, a sus etiquetas me remito). Avanzar que, como de costumbre, la próxima convocatoria será para el último fin de semana de mayo (¡yo ya he avisado!).
También desde Catalunya, el compañero Oliver demostró sus buenas prácticas monógamas apostando por una sola acompañante para su #FFdA: la De Molen Hemel & Aarde Bowmore / Caol Ila Barrel Aged (un poco más largo el nombre y me ocupa toda la entrada). Densísima y espectacularmente llena de matices, la compara con la Black Mes de Struise, aunque con un "golpe" de Islay más potente.
Pau tuvo en su cuarto #FFdA su edición más añeja (y vinosa, añadiría). Empezó a la luz del fuego con una Tramuntana Cuvée de Popaire, adquirida en el primer Fes-t'hi de Vilanova, que fue "una gozada", a camino entre cerveza y vino dulce, y con potencial recorrido adicional de no habérsela pimplado. Desde tierras canadienses, cayó una Péché Mortel de Dieu du Ciel!, una Imperial Stout que esconde sus 9,5% y que se presenta agradable, lejos de las bombas de sabor y potencia que últimamente se llevan. Finalizó con una cerveza que llevaba escondida desde 2011, una Mikkeller Mielcke & Hurtigkarl, de estilo belga y envejecida 6 meses en barrica de vino blanco dulce Château d'Yquem, estilo que tiene robado el corazón verde de Pau, y que otorga un carácter peculiar al global de la cerveza.
A diferencia de los demás participantes, Albert quiso participar por la vertiente exhibicionista de esta cuarta edición. Realmente, en verano se pimpló su fondo de armario, y es por eso que nos comenta que su primera elección fue la Trooper de Iron Maiden y Robinsons, que fue adquirida nada más aterrizar esta cerveza a la ciudad condal, y que fue degustada junto a una figurita freak de Eddie mientras atacaba con la guitarra los acordes iniciales melodía que da nombre a la cerveza. Como segunda cerveza, cayó la Verdi Black Jack Ilsay 2002 de Birra del Ducato, "de 45 minutos" y que deja con sensación de tristeza mientras va consumiéndose (¿depresión alcohólica?).
A continuación, el turno de Dámaso, que se lo tomó en serio con cinco cervecitas, belgas cuatro de ellas. Aún así, empezó con una de polaca (de Polonia, ojo) una Komes Porter Baltycki, guardada desde hacía un año, y calificada de "brutal". Ya entre balones y flamencos, siguió con una Struise Tsjeeses BBA Vintage 2011, un seguro de birra al que no pudo resistirse, y ya en terreno ácido cayó una Geuze Boon adquirida en la ya -desgraciadamente- difunta Maison Belge de Gracia. Como guinda, dos Bush distintas: una Ambrée caducada de 2010 ("todo un licor de peras") y la Cuvée Special de 2010, añejada en barricas de borgoña 9 meses, y compartida con su mujer para mayor satisfacción.
Tengo mis dudas de que entiendan, después de cuatro ediciones participando, el sentido del Finde Fondo de Armario en Cervecearte. Andrés y Mireia sacaron un arsenal de cervezas muy apetitosas, donde abundaban las... ¿¡jóvenes!? Con un mes de envasado, cayó la Firestone Union Jack IPA; también fresquita, la Real Ale Lost Gold IPA; recién chapada, la Hop Doom de Naparbier; y, aunque no especifiquen, dudo que fuera muy añeja la Ballast Point Sculpin IPA. ¿Creéis que les gusta el lúpulo? Para compensar su indisciplina, tomaron una 100% Gueuze Lambic Bio de Cantillon, y se copiaron (porque se la copiaron) la Alaskan Smoked Porter de un menda.
Con título al estilo hollywoodiense, Jorge nos relató su experiencia ffdaera a partir de tres cervezas y un plato de carne en salsa que le salió bastante carete, y es que la Emelisse White Label que esperaba su turno para esta convocatoria sufrió un pequeño accidente domestico... Cayeron, sin embargo, tres otras buenas cervezas como la Zombreaker, que a diferencia de Gonzalo encontró muy en forma aún, y poco evolucionada hacia Barley Wine. Siguieron -jódete- una Orval caducada de 2006, y que su mala guarda condenó a irse por el fregadero; y una cerveza, la Mikkeller Walk on Water que, por miedo, seguía ahí desde hacía tiempo, que resultó muy empalagosa. Balance irregular con doble decepción y un funeral. Si queréis echaros unas risas, de verdad, leeros la entrada entera.
JAB eligió un dúo clásico de esta convocatoria virtual para su cuarta participación. Por una parte, la Rodenbach Grand Cru; por otra, la gran Vintage Ale de Fuller's. Muy bien escudadas antes de ser consumidas, la primera fue afrutada, compleja, suave... una cerveza que estuvo en este #FFdA por varios motivos, pero especialmente después de una buena experiencia en la Belgian Beer Weekend. La inglesa, una gran cerveza "de sillón y chimenea", conquistó al autor de La Cerveteca con sus matices afrutados y dulzones. Termina el deliciosamente detallado post destacando la dosificación a la que se sometió por la cercanía de esta edición con las fiestas navideñas.
Una, pero qué una, eligió Hugo desde el histórico blog Hipos Urinatum. Recuperado para esta cuarta edición, Embracing Darkness volvió a elegir una cerveza estadounidense para ayudar a descongestionar sus reservas; concretamente, la Clown Shoes Blaecorn Unidragon, "una gran elección" muy equilibrada y con unos 12,5% muy bien integrados, aunque naturalmente muy potente y parecida a un licor. Con la descripción dada, entran ganas de probarla.
El penúltimo participante también se la jugó a una, pero en este caso belga. Dani, muy conocido por sus geniales vídeos en CerveTV, se metió entre pecho y espalda una buena birra de la Brasserie de la Senne: la Tripel Verschueren, que describe como muy fina pese a no ser precisamente amante de este estilo clásico de Bélgica.
Como reglas hay poquitas en este invento que es el #FFdA, pasada la convocatoria tuvimos un último participante: Francisco Javier, desde Cervezas Nacionales. En su curiosa experiencia, pudo tomarse una Vondel que había regalado a su hermana 10 años antes, rememorando así grandes vivencias en una cervecería de Aranda de Duero, donde adquirió la muy fondera cerveza. "Como encontrarse un billete de 20€ en un viejo abrigo".
Por mi parte, como ya pudiste ver en las dos entradas (1 y 2), saqué cervecitas notablemente añejas para la ocasión. "La Vieja" Ardenya de Guineu, "La Navideña" Ales Agullons Setembre Especial Nadal, "La Comprada" Alaskan Smoked Porter y "La Lujosa" Italian Strong Ale de Toccalmatto fueron las elegidas para esta cuarta edición del #FFdA, que pude compartir con la familia y con restricciones alimentarias que no me permitieron apostar por un acompañamiento sólido para los buenos líquidos tomados.
Y hasta aquí, todo lo que se daba...
Fondos de Armario, interiorismo y I Premio Interiorista-Patillero
Aunque no estoy muy seguro de que se entendiera a qué me refería con lo de enseñar parte de nuestros hogares, pasaré a hacer una mención rápida de lo que se ha podido ver de las casas y armarios ffdaeros en esta edición.
Cristóbal nos muestra su fiel guitarra eléctrica al lado de un interfono con ansias de protagonismo, a la vez que su simple pero efectivo estante para la guarda de cervezas y un bonito cuadro. Diego guarda sus joyas en varios ambientes, alguna de ellas oculta entre copas; me quedo con el fantástico mantel vintage (tipo camisa de los 90s) de una de las fotos, a juego con la Rodenbach. Txema tiene un práctico armario empotrado, rebosante de cosas y cositas, con las birras en contacto con el suelo frío. Por su parte, Rodrigo tiene múltiples espacios para guardar botellas, destacando que en su casa es más fácil pasar hambre que sed. Rubén cuenta con un armario de cocina para el consumo inmediato de cerveza, y un trastero para elaboraciones caseras o añejables, teniendo además un perro de peluche totalmente enternecedor. Teddy tiene montones de cajas, y nos muestra orgulloso los muchos archivadores de su colección de posavasos; ¡qué barbaridad!.
Fernando, aunque no hace mención, nos enseña unos cristales retros bastante atractivos. En Amante del Lúpulo nos sorprenden con un bonito fondo temático cervecero en sus fotos, a la vez que usan periódicos como mantel; que vivan los contrastes. Carlos Portolés ya se había adelantado y nos habló, en otra convocatoria, de su nuevo armario cervecero; en esta ocasión, aprovechó para presentarnos el armario donde expone los bustos de sus cazas favoritas. Destaca también su mantel con motivos culinarios. David y Débora nos enseñan el puzzle del directo de Jimi Hendrix en Woodstock, presumiendo además de sus "niñas". Gonzalo, muy tímido, nos enseña dos posavasos y una pared blanca; sin armario ni decoración. Roger nos muestra una instantánea de cerca de su armario, donde cervezones y vinos viven en perfecta armonía. Oliver también fue tímido, justificando la ausencia de fotos hogareñas por vivir en un piso pequeño, que sirve como armario en su totalidad.
Pau, no nos enseña su armario por distancia (¡excusas!), pero sí nos muestra su querida lumbre para dar envidia, junto con un librillo de Juego de Tronos. Albert nos enseña orgulloso su perfecta bodega de vinos (bajo llave para evitar males mayores con menores) adquirida hace 12 años, y que ha pasado a ser ocupada en buena parte por cervezas. Jorge nos da una pequeña vuelta de reconocimiento por su casa, con balda de garaje y cajas para guardar cervezas, una bonita bolsa de Hello Kitty y trastos variados. JAB se mueve en dos ambientes: el armario del salón y un trastero ideal pero "lejano"; demuestra, además, su buen gusto con un reloj de pared moderno y elegante. Hugo nos enseña, sin comentario, un rinconcito de su hogar, en el que entre cervezas se observa un objeto inquietante con forma de dama oscura, o algo similar. Dani CerveTV demuestra su arte fotográfico... y nada más. Francisco Javier cuenta con una nevera para cervezas, instalada a lo alto de una estantería en la que almacena las futuras botellas a refrigerar; a parte de un segundo espacio en la terraza. Por último, en el Blog Birraire os dejo ver la parte superficial de mi bodeguita, así como alguna de las cajas y apunto que existe una nevera, mostrando además distintos rincones de mi casa con fondos coloridos.
Aún no estando satisfecho con el nivel de patillerismo interioril (creo que ha sido bastante mayor en convocatorias donde no se hacía el llamamiento... cabroncetes), vayamos a por los guardones de esta edición. El premio al ambiente para tomar cerveza se lo llevaría Pau, a la fotografía el dúo observador con sus bonitas fotos con guitarras y ampli, y al interiorismo apostaría por el reloj de JAB o el cuadro de Cristóbal. Pero el I Premio Interiosita-Patillero del #FFdA es para el mantel de Diego, por ser clavada a una camisa de mis años mozos. ¡Enhorabuena! Aunque a decir verdad... creo que tengo una de muy similar incluso en estos momentos... a ver si mereceré yo un premio a la moda patillera...
Naturalmente, recalcar que, lejos de hacer mofa de nada ni de nadie, esta "distinción" es sólo una iniciativa más para fomentar el humor y las tonterías propias de este tipo de convocatoria.
Próximos pasos:
En cuanto a próximos pasos, esperamos ver pronto el post resumen de la convocatoria de La Noche Más Oscura (#LNMO) de Débora y David, y después de ésto no se prevé, por ahora, ninguna nueva iniciativa participativa.
En cuanto al #FFdA, la quinta edición marcará el segundo aniversario de esta particular excusa para sacar cervezas "especiales" del fondo de nuestros armarios. Es por ello que trabajaré para dar una nueva dimensión a la convocatoria valiéndome, quizás, de alguno de los participantes para ello. De ser así, no tardaré en contactaros para empezar a estudiar posibilidades... La cuestión es que el formato no se haga repetitivo, tratando de incorporar algún nuevo aliciente edición tras edición. Aunque ya os aviso que la novedad para la próxima será, de tener tiempo y éxito en llevarlo a cabo, un cambio mayor.
Nuevamente, gracias por vuestro entusiasmo y por participar una vez más.
Salut i birra!
Cristóbal nos muestra su fiel guitarra eléctrica al lado de un interfono con ansias de protagonismo, a la vez que su simple pero efectivo estante para la guarda de cervezas y un bonito cuadro. Diego guarda sus joyas en varios ambientes, alguna de ellas oculta entre copas; me quedo con el fantástico mantel vintage (tipo camisa de los 90s) de una de las fotos, a juego con la Rodenbach. Txema tiene un práctico armario empotrado, rebosante de cosas y cositas, con las birras en contacto con el suelo frío. Por su parte, Rodrigo tiene múltiples espacios para guardar botellas, destacando que en su casa es más fácil pasar hambre que sed. Rubén cuenta con un armario de cocina para el consumo inmediato de cerveza, y un trastero para elaboraciones caseras o añejables, teniendo además un perro de peluche totalmente enternecedor. Teddy tiene montones de cajas, y nos muestra orgulloso los muchos archivadores de su colección de posavasos; ¡qué barbaridad!.
Fernando, aunque no hace mención, nos enseña unos cristales retros bastante atractivos. En Amante del Lúpulo nos sorprenden con un bonito fondo temático cervecero en sus fotos, a la vez que usan periódicos como mantel; que vivan los contrastes. Carlos Portolés ya se había adelantado y nos habló, en otra convocatoria, de su nuevo armario cervecero; en esta ocasión, aprovechó para presentarnos el armario donde expone los bustos de sus cazas favoritas. Destaca también su mantel con motivos culinarios. David y Débora nos enseñan el puzzle del directo de Jimi Hendrix en Woodstock, presumiendo además de sus "niñas". Gonzalo, muy tímido, nos enseña dos posavasos y una pared blanca; sin armario ni decoración. Roger nos muestra una instantánea de cerca de su armario, donde cervezones y vinos viven en perfecta armonía. Oliver también fue tímido, justificando la ausencia de fotos hogareñas por vivir en un piso pequeño, que sirve como armario en su totalidad.
Pau, no nos enseña su armario por distancia (¡excusas!), pero sí nos muestra su querida lumbre para dar envidia, junto con un librillo de Juego de Tronos. Albert nos enseña orgulloso su perfecta bodega de vinos (bajo llave para evitar males mayores con menores) adquirida hace 12 años, y que ha pasado a ser ocupada en buena parte por cervezas. Jorge nos da una pequeña vuelta de reconocimiento por su casa, con balda de garaje y cajas para guardar cervezas, una bonita bolsa de Hello Kitty y trastos variados. JAB se mueve en dos ambientes: el armario del salón y un trastero ideal pero "lejano"; demuestra, además, su buen gusto con un reloj de pared moderno y elegante. Hugo nos enseña, sin comentario, un rinconcito de su hogar, en el que entre cervezas se observa un objeto inquietante con forma de dama oscura, o algo similar. Dani CerveTV demuestra su arte fotográfico... y nada más. Francisco Javier cuenta con una nevera para cervezas, instalada a lo alto de una estantería en la que almacena las futuras botellas a refrigerar; a parte de un segundo espacio en la terraza. Por último, en el Blog Birraire os dejo ver la parte superficial de mi bodeguita, así como alguna de las cajas y apunto que existe una nevera, mostrando además distintos rincones de mi casa con fondos coloridos.
Aún no estando satisfecho con el nivel de patillerismo interioril (creo que ha sido bastante mayor en convocatorias donde no se hacía el llamamiento... cabroncetes), vayamos a por los guardones de esta edición. El premio al ambiente para tomar cerveza se lo llevaría Pau, a la fotografía el dúo observador con sus bonitas fotos con guitarras y ampli, y al interiorismo apostaría por el reloj de JAB o el cuadro de Cristóbal. Pero el I Premio Interiosita-Patillero del #FFdA es para el mantel de Diego, por ser clavada a una camisa de mis años mozos. ¡Enhorabuena! Aunque a decir verdad... creo que tengo una de muy similar incluso en estos momentos... a ver si mereceré yo un premio a la moda patillera...
Naturalmente, recalcar que, lejos de hacer mofa de nada ni de nadie, esta "distinción" es sólo una iniciativa más para fomentar el humor y las tonterías propias de este tipo de convocatoria.
Próximos pasos:
En cuanto a próximos pasos, esperamos ver pronto el post resumen de la convocatoria de La Noche Más Oscura (#LNMO) de Débora y David, y después de ésto no se prevé, por ahora, ninguna nueva iniciativa participativa.
En cuanto al #FFdA, la quinta edición marcará el segundo aniversario de esta particular excusa para sacar cervezas "especiales" del fondo de nuestros armarios. Es por ello que trabajaré para dar una nueva dimensión a la convocatoria valiéndome, quizás, de alguno de los participantes para ello. De ser así, no tardaré en contactaros para empezar a estudiar posibilidades... La cuestión es que el formato no se haga repetitivo, tratando de incorporar algún nuevo aliciente edición tras edición. Aunque ya os aviso que la novedad para la próxima será, de tener tiempo y éxito en llevarlo a cabo, un cambio mayor.
Nuevamente, gracias por vuestro entusiasmo y por participar una vez más.
Salut i birra!
Comentarios
Publicar un comentario